Un consorcio de socios europeos y de todo el mundo, entre ellos RedCLARA, con el apoyo del Programa Horizonte Europa de la Unión Europea, lanzó a principios de mayo el proyecto “SUBMarine cablEs for ReSearch and Exploration” (SUBMERSE), que pondrá a disposición de la comunidad científica, la sociedad civil y la industria, datos de observaciones continuas en múltiples cables submarinos de fibra óptica, utilizando una configuración tecnológica normalizada, a escala continental.
Un consorcio de socios europeos y de todo el mundo, entre ellos RedCLARA, con el apoyo del Programa Horizonte Europa de la Unión Europea, lanzó a principios de mayo el proyecto “SUBMarine cablEs for ReSearch and Exploration” (SUBMERSE), que pondrá a disposición de la comunidad científica, la sociedad civil y la industria, datos de observaciones continuas en múltiples cables submarinos de fibra óptica, utilizando una configuración tecnológica normalizada, a escala continental.
El proyecto, que tendrá una duración de tres años, contribuirá con la investigación y la innovación en varios ámbitos científicos y sociales como los riesgos geológicos, la alerta temprana y la predicción de terremotos, volcanes y tsunamis, así como la detección y protección de la vida marina.
En los últimos años, la experiencia científica ha demostrado que los cables de fibra óptica desplegados en el lecho marino son una tecnología resistente y estable que puede ser utilizada como sensor para la vigilancia de la tierra y sus sistemas, en alternativa a otro tipo de sensores (como sonares, sonares, sismómetros, etc.) que suelen ser costosos, requieren más tiempo para la generación y transmisión de información y tienen una vida útil más corta. Tecnologías como el estado de polarización (state of polarization, SOP) y los sistemas de detección acústica distribuida (digital acoustic sensing, DAS) detectan ondas electromagnéticas, vibraciones y otros cambios en parámetros alrededor de un cable de fibra óptica y con un tratamiento avanzado de los datos, se obtiene información de calidad, a un menor costo y mayor velocidad.
Las infraestructuras de datos, las redes nacionales de investigación y Educación (NREN), y socios de universidades, institutos de investigación e industria de Europa han sido pioneros en el uso de fibras ópticas submarinas para ese fin. Sin embargo, hasta ahora, los experimentos se han realizado en localizaciones geográficas específicas, con duración, tipos de tecnologías y nivel de preparación sustancialmente variables, lo que dificulta la comparabilidad. Además, los resultados no suelen estar a disposición pública.
SUBMERSE busca superar estas brechas, al impulsar el acceso ubicuo y continuo a datos científicos fiables y de alta calidad provenientes fibra óptica submarina, a nivel continental, integrando las tecnologías y técnicas de vigilancia avanzadas como nunca antes se ha hecho y promoviendo la creación de nuevas aplicaciones e investigaciones en las ciencias de la tierra.
El proyecto busca crear una infraestructura de investigación que, por primera vez, permita realizar una serie de observaciones en múltiples ubicaciones geográficas y ofrecer conjuntos de datos que cumplan con los principios FAIR (fáciles de encontrar, accesibles, interoperables y reutilizables), a un flujo casi en tiempo real, usando aprendizaje automático (machine learning).
El proyecto construirá un instrumento de investigación de prueba de concepto en el Atlántico Norte y Sur, así como en el Mediterráneo. Este nuevo instrumento de clase mundial integrará las infraestructuras de las NREN y EPOS (European Plate Observation System) ya existentes y el servicio Copernicus Marine, de tres naciones europeas, así como instituciones paneuropeas y panamericanas, para difundir datos SOP y DAS conformes con FAIR, recogidos de las mismas fibras ópticas submarinas de telecomunicaciones ya instaladas y activas.
Este instrumento sería el modelo para la vigilancia continua de muchos más cables en el futuro, lo que conducirá a la apertura de nuevas oportunidades de mercado y la demostración de métodos para maximizar las inversiones en infraestructuras de investigación. Esto también repercutiría en la integración de las infraestructuras de investigación regionales y nacionales, proporcionaría métodos y herramientas científicas innovadoras y permitiría el desarrollo de nuevos servicios de vanguardia y conjuntos de datos a largo plazo de valor científico único.
“Este servicio de infraestructura de investigación puede cambiar de manera significativa las capacidades de la comunidad científica y traer importantes impactos sociales, económicos y medioambientales”, detalla Mark Urban, director de Cooperación Internacional, Relaciones Académicas y Comunicaciones de RedCLARA, quien estuvo presente en el lanzamiento del proyecto en Amsterdam, el 2 de mayo.
En el ámbito científico, SUBMERSE apoyará la innovación en investigación básica y aplicada, mediante el desarrollo de instrumentos de investigación normalizados de alta tecnología; en el ámbito social, mejorará el intercambio de conocimientos entre el mundo académico, la industria y el público en general y la sensibilización sobre cuestiones socioambientales; en lo económico e industrial, aumentará la competitividad de la industria e impulsará el crecimiento económico basado en la ciencia, mientras que en la dimensión medioambiental, traerá un mayor conocimiento para lograr entornos marinos resistentes y sostenibles.
El proyecto SUBMERSE será coordinado por Efis Centre (European Future Innovation Systems Centre) e implementado con el apoyo del consorcio de 24 socios, que juntos, representan una gran fuerza y experiencia en la implementación y operación de grandes redes. El consorcio reúne organizaciones técnicas, infraestructuras de investigación e industrias, con conocimientos técnicos y competencias interdisciplinarias, que también brindarán acceso a las infraestructuras necesarias para la implementación de la propuesta.
Como miembro del Consorcio y asociado del proyecto, RedCLARA, junto a otras redes e infraestructuras de investigación y tecnología, aportarán su experiencia en la gestión del ciclo de vida de los datos, seguridad y ética, redes ópticas, adquisición del estado de polarización, distribución de series temporales, diseño y desarrollo de software, infraestructura de autenticación y autorización, almacenamiento de datos, tratamiento de datos, marketing y comunicación, participación de las partes interesadas, formación y capacitación.
Específicamente, RedCLARA proporcionará acceso a equipos DWDM y longitudes de onda en el extremo brasileño del sistema de cable EllaLink, el único cable submarino de fibra óptica que une Europa y América Latina y el Caribe. Este cable fue desplegado en el marco del proyecto BELLA, implementado por RedCLARA y GEANT. “Una vez más, BELLA demuestra su potencial al servicio de la ciencia y el desarrollo en el mundo, sumando capacidades al proyecto SUBMERSE”, aseguró Urban.